como se escucha hoy, 18 años después.
martes, 9 de julio de 2013
Dialogando con Jim
como se escucha hoy, 18 años después.
martes, 28 de junio de 2011
"Fragile"

lunes, 20 de diciembre de 2010
El delfín verde.

En 1947, con una cadena de canciones exitosas y temas de cine tras él, Bronislau Kaper fue contratado para escribir la pista de sonido de la mencionada película. Sorpresivamente, el tema no fue un éxito inclusive con la letra de Ned Washington. Sería una década después de la grabación de Miles, cuando se establecería como una clásica del Jazz. Versión definitiva a paso lento cortesía de Davis con trumpeta muda, John Coltrane al saxo y Bill Evans al piano.
viernes, 22 de octubre de 2010
Scott

Considerando que el legendario bajista nunca grabó un álbum como líder, es nada menos que un milagro en los anales del Jazz que exista esta grabación y afortunados los que lo posean. Una rara ventana al espíritu de Scott, aparte de sus grandes sesiones con Evans, y un complemento al libro escrito por su hermana Helene LaFaro Fernandez, "Jade Visions".
miércoles, 15 de septiembre de 2010
El Rex

Bill Evans Trio en Vivo
martes, 14 de septiembre de 2010
De fiestas.

No vaya uno a creer, pero estos angelitos, en su día, también echaron sus canitas al aire, (algunos quizás lo sigan haciendo) pero siempre llega ese momento.
Y aquí los dejo, porque quiero tomar unas fotografías del paso de los escolares que traen, fatigados, la antorcha de la libertad desde la frontera norte camino al sur.
miércoles, 12 de agosto de 2009
AKA

Conforme te vas aficionando al Jazz van surgiendo inquietudes, quizás dignas de mejores causas, tal el caso que motiva esta entrada: el uso de la sigla AKA (Also Known As; también conocida como) en muchas canciones. Así, de pronto te ves averiguando porqué esa linda “Stairway to the stars” - que tanto te gusta interpretada suave y romanticamente por Bill Evans Trío (Chuck Israel al bajo y Paul Motian a la batería) en 1962 (Moon beams, Riverside, primer disco grabado después de la trágica y temprana muerte de su genial bajista Scott LaFaro), 27 años después de que la compusiera Matt Malneck y Frank Signorelli y le pusiera letra Mitchell Parish (se asume que ya sabes quienes son, de lo contrario, sigues sumando inquietudes)-,
se llama también “Park avenue fantasy”.
Y viene a resultar que la composición del violinista Malneck y el pianista Signorelli, es un trabajo extenso que, en efecto, fue nombrada primero así, por “Victor Records” para la interpretación de Paul Whiteman y su orquesta en 1934, y que fue publicada el siguiente año por “Robbins Music” como “A modern composition for piano” (aquí, no alarmarse, podría surgir la inquietud de averiguar algo sobre el comportamiento de la industria de fabricación de pianos en la época), cuya parte final fue grabada y llevada al número uno de la cartelera de éxitos por la orquesta de Glenn Miller en 1939, como la “Stairway” que tanto te gusta.
Como al principio todo cuesta y con la esperanza de que una próxima averiguación de esta naturaleza no presente tantos “AKAS”, mejor te quedas por el momento con el maravilloso arreglo del maestro Evans, de la melodía Hi Lil’ Hi Lo’ (también te toca tanto) de Bronislaw Kapper, a la que unicamente agregó entre parentesis “for Ellaine”, que sólo te deja (por el momento) la inquietud de saber quien era ella (y una leve sospecha de que podría ser la dama de la portada), habida cuenta que ya sabes que no es “Eliane”.
jueves, 23 de julio de 2009
Bill & Tony

En 1973 a sus 46 años, habiendo completado una relativamente breve estadía en MGM/Verve, Tony Bennett estaba inmerso en la formación de su propio sello discográfico –Improv Records- , cuando hizo un trato con el pianista Bill Evans (también en sus 46, cinco años antes de su muerte) para grabar dos LP’s, éste, para la disquera donde grababa Evans (“Fantasy”) y otro para continuar, con “Improv”.
El elegante y sofisticado cantante y su colaborador (“acompañante”, se sabe, no describiría la contribución de Evans, pero en en cualquier caso recibió parte igual del pago) se juntaron durante cuatro días en el estudio de grabación en junio de 1975, con nadie más que la productora Helen Keane y el ingeniero de sonido; y rapidamente grabaron uno de los mejores álbumes de ambas carreras.
Se dice que para Tonny, este que resultó un excelente híbrido Jazz/pop, significó iniciar su sueño de convertirse en un verdadero cantante de Jazz, a la altura de un Sinatra, aunque actualmente le siga apostando al lado comercial del género.