martes, 31 de enero de 2012

miércoles, 11 de enero de 2012

Begin the Beguine

¿Porqué Cole Porter, nacido hace ya casi 121 años , educado en Harvard (leyes y música…por separado) gracias al abuelo billonario, sigue tan vivo como cuando compuso y puso letra -en 1935- al célebre tema inspirado en una danza india, seis meses después de que en habituales prácticas de equitación su caballo le quebrara las piernas, perdiendo la izquierda?.
Para sus más ardientes aficionados, Porter, quien murió en 1964, no era -mejor dicho, no es- sólo un gran compositor y letrista de teatro, sino un compañero del alma con un conocimiento especial del éxtasis y absurdidad del amor romántico y la sátira de la alta sociedad. Porter el atormentado amante (“the lovely”), el abastecedor de pirotecnia verbal. El familiar y oscuro Cole que prevalece en infinidad de versiones, sean pop, rock, rap o lo que se antoje. Un nombre sinónimo de temas de amor ultra sofisticado como:

Melodías que examinan la pasión con ojo de relojero y sardónica e incisiva agudeza, y que sumadas a muchas otras de su peculio darían para una maratón de 14 horas.