Este álbum (Verve, 1965) es uno de los mejor orientados al Jazz del popular “entertainer” Sammy Davis, Jr, acompañado por la orquesta de Count Basie con arreglos de Quincy Jones. Sammy en la mejor forma, muestra aquí sus dotes de “crooner” muchas veces escondidas bajo la faceta que lo hizo famoso, cantando relajantes canciones del repertorio Jazzístico.
El acompañamiento es excelente y más que hacerle sombra al cantante, eleva el asombroso efecto de su singular estilo vocal (a pesar de que la orquesta, en algunos momentos parece dejar a Sammy sin aliento).
Naturalmente, no todas son tiernas y lentas musitaciones vocales de Sam:
La última pista es particularmente interesante. Sammy requiere un poco de música para bailar ( “Buck dance”, también conocida como Buck and Wing) en honor a su padre y sobrino; luego el “tap” danza a su modo a través de Bill Basie, quien cierra diciendo "It can't get no better than that." , declaración que resume perfectamente este álbum.
10 comentarios:
Sammy Davis no era un cantante grandioso pero era eficaz y sobre todo un gran showman. Su problema quizás fue formar parte del Rat Pack lo cual le perjudicó mucho musicalmente, aunque quizás no en otras facetas, teniendo que compartir escenario con Sinatra, Dean Martin y en algunas ocasiones con Judy Garland.
Me gusta Sammy en todas sus facetas de cantante, gran comediante, estupendo bailarín, músico y actor. Vivió una época de un racismo durísimo y eso lo atormentó durante toda su vida. Aunque gracias a su personalidad de estilo enérgico y directo consiguió que un numeroso público lo apoyara siempre.
Las grabaciones junto al gran Count Basie son exquisitas.
Armando, gracias por este estupendo disco! Un abrazo!
Artista de la cabeza a los pies, el hombre que lo sabía hacer todo. Me gusta esta reunión con Basie, a mí me transmite una tremenda sensación, no sé, de profesionalidad, de gente excelente, que sabe perfectamente lo que hace, y disfruta haciéndolo. Gran disco.
Saludos.
Realmente eficaz, Dr., logró conciliar sus objetivos multifascéticos, a pesar de lo mencionado.
Comparto sin reservas tu opinión sobre Sammy y sobre sus grabaciones con Basie, Esther.
Que no hubiera dado por asistir a esa reunión, Troglo y verlo bailar al final esa melodía.
Abrazos a todos.
Fantástico. Qué bien empastan su voz y la orquesta. Comparto la opinión de Esther: era un artista de los pies a la cabeza (y por eso fue tan polifacético). Y destacó, como un rey Baltasar, entre los grandes más blancos de su época.
Me alegro que guste, Sebastian. Está bien eso de rey Baltazar. A ver si esta semana le puedo dedicar un tiempo a escuchar tu "soundtrack" del negro que parecia blanco, en tu última entrada.
Un abrazo
dos gigantes, en práctica, y cómo swing!!!
¡Muchas gracias!
Buenos de verdad, amigo.
Prego
Sammy Davis, un gran cantante, con un swing como pocos.
Saludos,
Gente así siempre estará presente en la música de Jazz, Hector.
Saludos
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