jueves, 21 de mayo de 2009

Una de baladas

(Foto de Frank Steward, diseño de Mark Larson).

Pasa que hoy, para acompañar la cena con el disco “Piano” de Wynton Kelly, sobre el cual pensaba hacer un post más tarde (ahora), coloqué el disco y me quedé como tres minutos (soy paciente) mirando el intermitente “reading”. Molesto, lo primero que pensé fue olvidarme de la música y volver a leer la famosa “Balada de la carcel de Reading” de Oscar Wilde, pero esto implicaba una búsqueda de más de cinco minutos (soy impaciente). Pudo más la gana de compartir algo de este álbum (Standards & Ballads) grabado por el trompetista Wynton Marsalis (así nombrado por su padre en honor a Kelly) en 2008 para Columbia Legacy.

Pues bien, este acádemico hijo del pianista Ellis Marsalis, hermano menor del saxofonista Bradford y mayor del productor musical Delfeayo y del aún indeciso Jason (todos ellos hacen un tercio de la nómina de este disco) nació en Nueva Orleans en 1961 y después de mucho estudio y talento (que también hace falta), tocó su primer trompeta (regalo de Al Hirt, empleado de su padre) con la orquesta civil de la ciudad y en 1980 hizo su primera grabación con “the Art Blakey Big Band” y se unió a “the Jazz Messengers” del mismo Art.

En 1981 ya era la comidilla del mundo del Jazz y al final de la década reconocido como uno de los mejores trompetistas clásicos de todos los tiempos. En 1997 su maratón “Blood in the fields” (publicada en 3 compactos) fue el primer trabajo basado en el Jazz que ganó el premio Pulitzer. El nuevo siglo lo encuentra grabando para el sello “Blue Note” discos como “Unforgivable blackness” y la pista de sonido para la documental de Kern Burns sobre la historia del Jazz. Y como si fuera poco, en 2007 graba esa suerte de alerta político social “From the plantation to the penitenciary” con Legacy.

5 comentarios:

Doctor Krapp dijo...

Wynton la gran esperanza negra. Grande en muchas cosas y muy pequeño en otras, pero con la suficiente inteligencia y gallardía para saber rectificar aunque le pierda su algo atroz academicismo.

Esther dijo...

Justo estos días estoy leyendo sobre los Marsalis, a raíz de ir la semana pasada a un estupendo y tremendo concierto de Branford (se escribe con una sola "d"). Me gustan mucho los Marsalis, al igual que los Montgomery. Qué familias, así da gusto. O sea que le pusieron Wynton, por Kelly. Qué suerte tener un padre así. tan entregado a la causa del jazz.

Ahora estoy escuchando tu selección de temas. Magnífica. He visto que Wynton Marsalis actúa este verano en el festival de San Javier, en Murcia. Y la verdad, me tienta mucho ir hacia allí.

Un abrazo.

Esther dijo...

Qué baladaza el último tema!!!

Armando dijo...

De acuerdo contigo, Doctor.

Armando dijo...

Espero con ansias tus fotos de Branford y las probables de Wynton, Esther. ¿Algún libro en particular que me puedas recomendar? Las otras dos me parecieron buenas tambíen, aunque no estoy seguro si son baladas o estándares o ambas cosas. ¡Help¡

Un abrazo fuerte