lunes, 23 de marzo de 2009

Uno a Uno


DMP Recordings fue creada en 1987 por el pionero de la digitalización Tom Jung. Como presidente y como ingeniero a cargo ha construido su compañía siguiendo el creciente conocimiento de la tecnología digital, pero también con un profunda pasión a la música, de modo que la política de este sello es grabar músicos de jazz en un amplio espectro de estilos, cuyas composiciones y actuaciones puedan comunicarse mejor con la oscilación extendida y ondura del audio digital y así conseguir la linea más directa y el traslado perfecto desde el estudio al ambiente donde se vaya a escuchar el producto final. Siendo Jung un creyente en que la escencia y pureza del sonido digital es mejor servida retornando a las técnicas básicas del negocio, restringió en consecuencia, el número de elementos colocados en la cadena de grabación. Así, decidió en un primer ensayo grabar (entre cincuenta más) directo a digital de dos pistas el compacto “One to One”.

¿Cómo pasó esto? Pues, despierto y emprendedor como era el joven Jung, barajó todas las posibilidades del título que primero se le ocurrió, y sabedor (gracias a sus conocimientos informáticos) de que el fino pianista Bill Mays (Sacramento, 1944), gustaba a menudo dejar atrás el escenario y de que el sedoso (aunque no lo parezca) bajista Ray Drummond (Brook Line MA) prefería siempre mantenerse ocupado en tomar y retomar lo que fuera pertinente a la música, decidió contactarlos. Bill por eso días se presentaba con su grupo en audiciones televisadas por WVIA


Ray andaba en gira primaveral acompañando al grupo de Hendrick Murkens y decidió aplazar un compromiso con el cornetista Bobby Shew y otro con la orquesta de Mel Lewis.


Empezó el trabajo que no es poco. No se quienes participaron en la producción de la portada pero me gusta.

Finalmente llego el lanzamiento (1989) y los conocedores coincidieron en que el fantasma de Bill Evans habia estado presente durante la grabación y en que la conversación sostenida por el dúo era reminiscencia de las sostenidas por Evans y sus varios bajistas. Reconocieron, eso sí, que ambos operaron como iguales, ya que Drummonds parece controlar la música al menos tanto como Mays y que el espacio para solos fue igualmente compartido. Bill por su parte comentó que no estaba imitando a Bill sino que siguiendo esa tradición. Y Ray agradeció el reconocimiento a su versatilidad.

Jung no quedó conforme y prometió un “One to One 2” que lanzó 2 años después.

3 comentarios:

Esther dijo...

Me ha gustado leer sobre DMP Recordings. Muy bonita la ilustración de la cubierta del disco. Escuché en directo a Ray Drummond, en un pequeño club de jazz en San Sebastián, que se parece mucho a la ilustración de tu disco, el Be-Bop Bar. Fue en 1992 en pleno Festival de Jazz. Puedes ver una foto que le hice, en mi blog.

Un saludo.

Troglo Jones dijo...

Estás incansable, Armando. Tengo cosas de Billy y cosas de Ray, pero no a los dos juntos, je, je. Sin embargo, estoy seguro de haber tenido ese disco en las manos. No sé qué pasaría, quizá me lo quitó el loro.

Saludos.

Armando dijo...

Es interesante leer sobre las firmas disqueras y agradable encontrarles el lado humano como en caso de DMP (lo sellan con minúsculas), Esther. Con esto del blog me he dado cuenta de lo que ha prendido el Jazz en toda España. Antes creía que era cosa de un par de locales en ciudades como Madrid, Barcelona o Bilbao. Pero veo festivales por todos lados y particularmente en el Pais Vasco. Mira que encontrarlo en un pequeño club de San Sebastian (tengo la idea de una ciudad conservadora) como el de la portada. Aunque viéndolo bien, no creo que alguien como digamos Woody Allen encuentre algo así en Nueva York y además el ambiente adecuado para Ray. Por cierto, creo que fue en tu blog que vi fotos de Golsson en Biarritz. Voy a verlo, no para desengañarme por que se que eres una persona seria, no como otros que conozco.

Besos grabados.

Pues si, amigo Troglo (no se porque se me ha metido que tu primer nombre es Miguel y que el segundo apellido del Doc. es Jazz), se le pega a uno la energía de Ray. Pues debe ser el que encontre tirado en la calle la vez pasada que estuvo libando y revolotendo por aquí, pero sólo encontre la cajita con el librito. El que sï tengo desde hace años es el 2 y me gusta como no tienes idea. Parece que superó por mucho al primero. La portada es diferente, con buenas fotos de ambos y tipografía colorida.

Saludos.